lunes, 27 de agosto de 2012

Forasters

Sí, hoy voy a volver a la polémica, que sé que os gusta más que a un tonto un lápiz. Además, después de ir escribiendo posts a cuentagotas creo que os lo debía. ¿Y cuál es el tema polémico sobre el que voy a escribir? Lo tenéis en el título: los forasters (forasteros).

Ya sé que esta palabra se usa en muchos lugares y con significados similares, pero en Mallorca adquiere ciertas connotaciones extra que, por ejemplo, en Menorca no tienen (o no con tanta inquina, que los menorquines son muy majos). Yo tengo asumido que soy media forastera, así como que cuando voy a dar clase a un pueblo monolingüe catalán soy la "mestra de foraster". Estupendo. Y aquí paz y después gloria.

"¡Pero tú eres mallorquina!", me insisten muchas personas. Sí, lo soy, pero usted no puede evitar que me sienta mitad y mitad, según las vivencias que he tenido y la educación que he recibido. Yo le puedo contestar lo que usted quiere oír, pero mis sentimientos no los puede cambiar. Me siento mallorquina, canaria y un poco menorquina, ésa es la gran verdad. Aunque a muchos les duela oírlo también me siento española, aunque el país se vaya cada día más a la mierda.

"Ah, bueno, pero tu madre es de Canarias, no es forastera." Y es que, a mi juicio, el mallorquín distingue entre "tipos" de gente "externa" -palabra que mi madre odia y a mí no me hace mucha gracia-. Entre los diferentes tipos de gente externa nos encontramos, más o menos en orden geográfico, los siguientes grupos:

1. Gent externa: gente que no es de tu pueblo y viene para las fiestas.

1.1. Gent extera / llonguets / palmesanos: gente de Palma y alrededores que cree que Mallorca acaba en la Vía de Cintura, o a lo sumo en Festival Park. Muchos de ellos son canis, aunque no todos, también los hay que son mallorquines que salen a explorar el territorio comanche, eso que se da en llamar Part Forana (todo lo que no es Palma ni los municipios más poblados que la rodean).

1.2. Menorquines e Ibicencos. No existe en las islas un sentimiento de "balearidad", no existe la concepción de decir: "Yo soy balear". Cada uno es de su isla y punto. Esto viene marcado por múltiples factores, como por ejemplo el rey de la conquista, los diferentes dominios, etc. Menorca, por ejemplo, tuvo dominación francesa e inglesa, en cambio Mallorca no. El cariño por las demás islas es manifiesto, aún así, y para hacer honor a la verdad, imagino que en Menorca e Ibiza deben estar hasta las narices de que la mayoría de servicios y oportunidades se centralicen en Mallorca por ser la isla más grande, y tienen razón. En Canarias ese sentimiento de unión del que hablo sí existe, imagino que tanto porque ha existido ya históricamente como por la lejanía que tienen respecto del grueso del territorio nacional, aunque en todas partes cuecen habas.

2. Forasters. Ah, amigos, aquí viene lo bueno: ¡ESTO ES EL LEJANO OESTE! Se entiende por foraster a cualquier persona que provenga del resto del Estado Español, con la excepción de Cataluña, País Vasco/Navarra y Galicia. Los de Valencia (por extensión: Comunidad Valencia) se asocian según cómo hablen o a quién voten. No hay más. Si sois un poco avispados adivinaréis el porqué de esta diferenciación.

Efectivamente: el hecho de hablar una lengua distinta al castellano es la clave, así como otros asuntos de índole territorial, histórica y económica en los que ahora no voy a entrar. Creo hace 75 u 80 años la cantidad de gente monolingüe solamente en gallego o euskera no debía ser muy elevada; en contraste, sí que había muchísima gente que era monolingüe sólo catalán, y más en las islas. Esto no se debe solamente al factor de la insularidad, sino también al peso demográfico, contrastable también hoy en día. Y no miento: mi abuelo era monolingüe catalán, entendía el castellano, pero no era capaz de hacer una frase completa, y no precisamente porque fuera estúpido, sino porque para él el castellano suponía una lengua extranjera, que no le era propia, que aprendió de la administración (imagino que cuando fue a la mili) y a través de los medios de comunicación.

No voy a entrar aquí en la actitud que se adopta desde los distintos lugares hacia una lengua que no es la suya, porque eso depende de cada persona, de su educación y de su cultura. Lo que es irrefutable es que de tener dos lenguas a tener sólo una media una concepción del mundo que sólo las personas que lo experimentan son capaces de explicar y de comprender. Caso a parte lo forman el aprendizaje de lenguas extranjeras no oficiales en el territorio español (aunque en Mallorca, a este paso, muy pronto el inglés y el alemán van a ser cooficiales).

¿Y Canarias? Canarias está lejos, muy lejos. El hecho de no encontrarse en la Península Ibérica (algo obvio si uno mira un mapa) hace que, cuando, por ejemplo, mi madre contesta que es de Tenerife le digan: "Ah, pero eso no está en la Península." Creo que es aquí cuando el factor de la insularidad y del puteo de estar aislado entra en juego.

Para sintetizar este apartado: un foraster es, de entrada, cualquier persona que hable castellano. Luego ya separaremos el trigo de la paja.

3. Guiris: cualquier turista con pintas de ser del centro o del norte de Europa.

4. Ya que estamos, y como igualmente me vais a poner de vuelta y media, y me da igual, también voy a hacer mención a otros grupos. Por favor, no entendáis esto como una segregación despectiva, sólo intento mostrar los vocablos de la realidad. Si alguien se siente ofendido por ello le pido de antemano mis más sinceras disculpas, pero esté bien seguro que no verá aquí nada que no oiga diariamente en la calle. Pues bien, entre estos grupos nos encontramos:

4.1. Los moros. Así, tal cual. No sólo hoy en día pueden producir rechazo por provenir de una cultura diferente que se caracteriza, en general, por el sometimiento de la mujer, sino que tenemos que pensar que el Rei en Jaume, Jaime I el Conquistador, luchó contra ellos y los expulsó de la isla. Además, durante los siglos siguientes, especialmente entre los siglos XV y XVIII (si no voy mal) las incursiones de piratas turcos y argelinos fueron el desastre más temido por los habitantes de las islas. Recuerdo de ello son las fiestas de Moros y Cristianos de Sóller y de Pollença.

4.2. En otro saco poco definido nos encontramos a los negros (no hace falta explicar por qué se les llama así, ¿no?), los rumanos, los chinos (por extensión, cualquier oriental) y los sudamericanos (a los que despectivamente se les llama "sudacas").

Espero haber dado un esbozo de lo que, en mi opinión, es la percepción de los grandes grupos sociales que tenemos los mallorquines. Estas denominaciones puden usarse solamente de una manera denotativa, sin intención negativa o peyorativa alguna, o de una manera descortés y como insulto (excepto en el caso de "las guiris", en femenino, con las que el macho mallorquín se vuelve loco); todo dependerá del contexto y de la entonación, así como de ciertos calificativos que las puedan acompañar. No es lo mismo decir "Aquest és foraster/moro/guiri/llonguet" a decir "És un puta guiri/moro/foraster/llonguet".

Lo importante, a parte de cómo nos llamemos, es tenernos respeto. Yo puedo despotricar contra un grupo, pueden caerme mal, los puedo odiar..., pero lo que nunca puedo hacer es agredirlo o vulnerar sus derechos, así como tampoco me gusta sentirme agredida o ver que me restringen los míos. Hay un refrán en castellano que reza que del dicho al hecho hay un buen trecho, y creo que es totalmente cierto. Obviamente todo es matizable, pero, por muy susceptibles que seáis, no me negaréis que, al menos en el fondo, algo de razón lleva este pequeño artículo. ¿O no?

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Como yo soy medio forastera, y orgullosa de serlo, pero entiendo y comparto también el sentir de la gente de aquí, porque también soy medio mallorquina, os paso un enlace a un post que habla sobre el uso del catalán en Baleares y que fue noticia hace unos meses:

Enllaçats pel català

¡Con lo bonito que es tener dos culturas, dos lenguas, dos tradiciones, dos trajes regionales y dos gastronomías!

7 comentarios:

  1. Redei de forasters :P27 de agosto de 2012, 16:49

    He rigut molt =P

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  2. Quan jo era petita i vivia a Alaoir sempre em deien: és filla de foraster. Era una marca que havies de dur, et volien xerrar sempre en castellà encara que tu diguessis que eres d'Alaior. Els forasters i els hippies eren els culpables de totes les desgràcies del poble, sort que després van venir els moros i els immmigrants a fer-nos reforç!

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    1. Ai, sí, Carme! Això de ser mitja forastera és... uff! Tot un miasma!!! Al menys ho era! A mesura que el nostre entorn es va fent més gran i que coneixem més del món els "forasters" són els de més enllà i reben altres noms... Òbviament els diferents sempre són els altres, mai nosaltres!!! És allò de sentir-se la guixa del món... Tot depèn de les circumstàncies i de qui és foraster en cada cas. Jo no sóc la persona més tolerant del món, precisament, però hi ha distincions que em fan gràcia, especialment quan veig segons quins fets! Una besada!!!

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    2. Ah, i com m'he pogut oblidar dels jipis i dels grenyuts!!!! Un altre gran grup!!! Com que no duen abric de pells... xD

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  3. Majorica entera se sent molt forastera

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  4. Mallorca Entera , se siente forastera

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  5. Majorica entera se sent pero..pero que molt moltisim forastera

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