martes, 2 de diciembre de 2014

Ni me representan, ni me apetece perder el tiempo.

El próximo jueves 4 de diciembre se celebrarán las elecciones sindicales dentro del ámbito docente balear. Una chorrada como cualquier otra, y antes de que me echéis a los leones os diré por qué. En primera instancia os diré que estuve tres años afiliada a un sindicato y que cuando los necesité me dejaron colgada de la manera más miserable que tiene un sindicato: sin amparo administrativo ni jurídico. En ese caso tuve suerte de que la administración "se portara bien" conmigo, pero perdí una vacante y probablemente la opción de trabajar en mi isla. Olé por el sindicato.

En segundo lugar nos encontramos con el hecho de la representación sindical ante las instituciones. Aquí no sé si reír, llorar o directamente sacar la metralleta. ¿Habéis visto cómo son la gran mayoría de los sindicalistas de educación? Son personas totalmente desconectadas de las aulas, algunas son capaces de llevan más de 20 años sin pisar una clase y tienen el morro de dar lecciones. Y lo de que luchan por nosotros... por favor. Luchan por mantener su sillón y su comisión de servicios en el sindicato. Asco me dan. Todos. Sé que tengo amigos que han sido sindicalistas, o bien que se han presentado o se presentan a estas elecciones. Los aprecio mucho porque sé que son personas muy valiosas, pero creo también que igual son un poco utópicos. Ya sabéis que yo soy de las que piensan que es más útil un buen fusil que veinte conversaciones estériles. 

En tercer lugar, las elecciones se celebran en un día que es festivo en el municipio en el que se halla mi centro. Además, si hubiera sido laboral me hubiera tenido que desplazar al pueblo de al lado para votar, y paso. Mucho. Más paso aún si tengo que conducir 50m de ida y 50 de vuelta para ir a votar algo en lo que no creo. No way! Y tranquilos, luego no me quejaré ni de quien haya salido ni de lo que hagan. 

El cuarto motivo que me lleva a no votar es el hecho de que considero que los sindicatos son muy partidistas. No sólo eso, además, creo que los sindicatos no son, hoy por hoy, y desde hace tiempo, nuestros mejores representantes. Si lo pensamos fríamente, ¿por qué la Consejería se niega a hablar con la Asamblea de Profesores y sí convoca a los sindicatos? Algo huele a podrido en Alfons el Magnànim. 

Finalmente, sólo me queda añadir que cada vez considero más inútil la labor sindical, ya que me inclino más por el corporativismo y, sobre todo, por contratar un buen abogado cuando tengas un problema. Lamentablemente, si uno quiere solucionar las cosas, no le queda otra que la vía legal que, además, suele ser la más efectiva. En definitiva, no iré a votar porque mis expectativas sobre los sindicatos son poco halagüeñas (incluidos los dos nuevos). Ni me representan, ni me apetece perder el tiempo.

3 comentarios:

  1. Jo votaré sols perquè la Conselleria no publique que els docents passem de votar, però tampoc em sent representada per un sindicats que depenen econòmicament del govern i en els quals hi ha gent per fugir de donar classe amb els xavals.

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  2. La mayoría silenciosa.

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  3. Jessy, crec que la Conselleria igualment publicarà allò que voldrà. Apreciado lector anónimo, siempre he creído que hay muchas mayorías silenciosas y que éstas piensan de maneras muy divergente. Mil gracias por comentar a los dos.

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