domingo, 18 de marzo de 2012

Brutalidades, animaladas y bestialidades varias...

Sí, chicos, lo sé, hace tiempo que no escribo, y no por falta de ganas, sino por falta de tiempo. Sobrevivo dignamente a 15 días de dieta y aún no he matado a nadie (obsérvese el matíz del adverbio). El tiempo me lo quitan las correcciones de los disparates de mis alumnos. 100 trabajos y 100 exámenes... Entre esto, que soy vaguilla y que, cuando me pongo, soy lenta corrigiendo... ¡apaga y vámonos!

Y es que alguna alma cándida aún pretende "haprovar" (sic) escribiendo de esta manera. Estoy cansada de ver tildes a la catalana y pronombres átonos separados. Si es que por mucho que les recuerde en medio del examen que las tildes en castellano van todas hacia el mismo sitio, ellos como quien oye llover... No releen lo que escriben, y así de mal les va.

No os asustéis, no todo son cazurrillos (a los que quiero con locura, por si alguien lo dudaba), también tengo (bastantes) sujetos que sacan buenas notas, pero, como de costumbre, siempre deben dejar alguna lindeza ortográfica o gramatical en el examen. Si no, parece que no salgan contentos... Se ve que no se habitúan a hacer y repasar los"deveres", o no saben escribir en una "oja" en blanco porque seguramente están mucho tiempo con el teléfono "mòbil".

Y todo esto me lo he encontrado entre media clase de 2º D (mi tutoría, para más inri). Ahora voy a por la otra media. Menos mal que estos disparates se me olvidan cuando he acabado de corregir, que si no... Prometo dedicaros un ratito después de las evaluaciones y explicaros cómo y por qué la anchura de mis caderas llegó a ser ayer por la noche un tema de debate... (Voy a matar a alguien, os lo juro, yo me cargo a alguien antes de llegar a Semana Santa...)

No hay comentarios:

Publicar un comentario